Duermevela de un esclavo

Duermevela de un esclavo

No estamos solos, ninguno lo estáis, somos legión


No estamos solos, ninguno lo estáis, somos legión. ¡Mandamos!. No es cuestión de votos, ni de conciudadanas viejas. No es preciso que miréis a la derecha, o a la izquierda… ya no. Las ideologías murieron en los primeros ochenta del siglo pasado. Con la democracia de partidos viejos y caducados ya entonces. De hecho, la democracia carece de sentido… y también la constitución… todas las “constituciones”, que en el fondo, y en las formas, son papel mojado. Porque lo que importa es La Libertad. El conocimiento de que juntos somos libres, y no esclavos… Pero… ¿ansiáis La Libertad… o, una casa más grande, un coche más rápido… una amante más fogosa, comer todos los malditos días del año en un jodido restaurante con estrella Michelin?. ¿Qué queréis?. Os lo voy a decir: La gran mayoría de la gente de eso que se denomina La Izquierda… no quiere la revolución. No quiere ver su vehículo rayado, con sus ruedas pinchadas ni rajadas ni quemado en mitad de la calzada. No quiere perder su trabajo que pende de un hilo… como no quiere ver perder a su equipo de fútbol ni desea que sus hijos suspendan los próximos exámenes que tienen pendientes. Y todos aspiran a gobiernos honestos que les protejan… que les brinden mejores servicios sociales, impuestos justos y paritarios… etcétera, etcétera… etcétera… Mas… la pregunta es: ¿Qué están dispuestos a sacrificar por ello?. Por La Libertad. ¡Nada!. La Izquierda tan “comprometida”… como La Derecha tan patriota… son simplemente… una jarfia de borregos miserables. Los unos poniendo en sus balcones banderas de España fabricadas por los chinos… y los otros… aspirando a que eso llamado La Justicia Social y que la puñetera redistribución de la riqueza llegue hasta ellos algún día cual el maná bíblico, por generación espontánea.
Pero no estamos solos, ninguno lo estáis, somos legión. No importa nuestro nombre ni nuestro credo. Creemos en que únicamente El Conocimiento salvará a la especie humana. Pero no ha de alcanzar a todos los hombres… Algunos tienen que perecer… No merecen la redención, ni el amor de los “dioses”… ni la caridad de la inteligencia. Viven en la oscuridad… y en ella deben permanecer: Hijos de un Dios Único y castigador… Hijos de una fe tan pagana como ciega de compromisos solidarios; hijos de una sociedad enfermada en peleas mezquinas, realidades obtusas, entretenida en ocios mostrencos. Y vuelvo a la pregunta… la única y verdadera pregunta: ¿Qué queréis?. Subpregunta: ¿Qué estáis dispuestos a sacrificar por ello?. No sé… ¿Ofrendaríais vuestro vehículo qué os lleva al trabajo cada día por La Libertad de toda la raza del hombre?. ¿Consagraríais vuestra vida entera y el techo bajo el qué duermen vuestros hijos por El Conocimiento, La Igualdad, La Virtud y el futuro en paz de una Humanidad en Mayúscula?. ¡Claro qué no!... Y tampoco se os pedirá jamás tales sacrificios… mas… vuestra aspiración no es la inmolación en aras de hacer mejorar el mundo… Ansiáis, objetos… posesiones, objetivos más importantes… riquezas sin número, placeres exquisitos… ¿No?. Y de no ser así… ¿Hasta dónde queréis crecer?... Y así es… Algunos tienen que perecer… (Lo siento… o quizás no…) No merecen la redención, ni el amor de los “dioses”… ni la caridad de la inteligencia. Viven en la oscuridad… y en ella deben acabar. Por no ser “egoístas”, por no ser “materialistas”… por no ser, sencilla y simplemente… buitres “cómodos”, y bien aprovechados. En fin… somos legión… vemos la “alambrada”, a los “hambrientos” que les van a devorar por los pies… Me pregunto qué esperan todos esos idiotas…