Lo opuesto a la virtud es la corrupción… el
vicio, la depravación, el delito, la degeneración, la perversidad… ¿Cuántos
españolitos de bien han caído en tales libertinajes?. Han robado… o consentido,
que otros lo hagan sin inmutarse con tales prácticas. O están dispuestos al
borrón y cuenta nueva… o al simple olvido. O han dejado el país en manos de
tales sinvergüenzas… y siguen optando por lo “malo conocido”… Hay quien los
llama Hipócritas… yo no. Primero son gilipollas… por dejarse “engañar”, entre
muchas comillas… y después, unos hijos de la grandísima puta… por hipotecar el
futuro de sus hijos, de sus nietos… de su país. (Patriotas de mierda) La
Virtud, con mayúsculas… es, moralidad, bondad, excelencia, ética, decencia,
moderación, austeridad, caridad, templanza, honradez, integridad. “Virtudes
cristianas”… ¡no!. Ni muchísimo menos. Virtudes humanas. Lo inhumano, lo
“decente”, lo “cristiano”… y, “creyente”… es lo que tanto meapilas, “honrado”
padre y madre de familia… ha consentido todos estos años; el retroceso de las
libertades, del Estado del Bienestar, en fin… la decadencia de La Virtud, la
estamos pagando con el hecho de haber dado alas y pábulo al miedo. El miedo de
habernos creído reyes cuando éramos mendigos. Y más que mendigos… miserables.
Miserables con coche… miserables con hipotecas… miserables… obreros de oficina
y trajes de las rebajas que se creyeron, y algunos “aun se creen”… que juegan
en la misma liga que los grandes prohombres que han generado éste sindios. Pero
yo tengo la conciencia limpia. Nunca les he votado. Nunca he delegado mi voto
en los perros de la patronal… los mercados, el capital, “el fascismo
económico”… (¿Hay otro?)
Pero que importa. España está entretenida con
un teatrillo de marionetas y comedia ligera. Está el títere de Puigdemont y de
esa niñata ahora travestida en pija de La Gabriel. Comedia ligera la huelga
feminista… porque francamente todos y todas sabemos que al establishment empresarial español eso se la suda… y
van a seguir explotando la “miseria” de la borreguna trabajadora española como
siempre lo han hecho, con su “becha” salarial Hombre-Mujer, así con los “maduros”…
como con los jóvenes. Pequeño dramatiquillo en platea, y del bueno, el del
Tribunal de Cuentas, la financiación ilegal de los partidos… “decentes”… Una
reflexión: Si los grandes empresarios están poniendo sus “inversiones” y
esperanzas en un soplagaitas como Albert Rivera… ¿en qué coño piensan sus
potenciales votantes, obreretes españolazos de oficina… qué les va a beneficiar
el votarle?. En fin, dejémosles que crezcan… y se convencerán… o mejor dicho,
dejémosles ver el hundimiento desde la cubierta con la tuna de tanto tunante
cantando a diez voces clavelitos de mi corazón. Al final hasta me va a
emocionar y voy a soltar una lágrima por el ojete con la versión cantada por
Marta Sánchez del Himno Nacional. Aunque molaría más si empezara así: Viva España
y el 0´5 que sube la pensión de ese buen español. Viva España y que se pudra
ese rapero que insulta al Borbón… ¡Pedazo de Ca… mpechanón!. Uuuuf… No están
los tiempos para bromas.