Uno por si mismo ve las idiosincrasias
de España. Las particularidades de sus pobladores idiotas. España es una gran
familia sentada a la mesa, con sus líneas consanguíneas, y sus líneas
“políticas”. Con sus nueras santurronas y devotas, sus hermanos
“brillantemente” apolíneos… y sus cuñados más que gilipollas. La España de
pandereta y sacristía, sigue ahí… ¡Presente!. Cerril y provinciana. Con su
ademán… y su rima, de División Azul… y saludo a la romana 3.0. ¡Qué hostia
tienen!. España perdió su camino a la redención hace ya tiempo… ahora es una
dictadura charcutera perfectamente democrática. Con su corona, y su “reina de
corajones”. Y su monarca, absolutamente “Borbón”. Los hay tan ilusos que creen
que por votar un parlamento, se vive en democracia. Y una democracia es tener
derechos… Derechos que no sean vulnerados. Y la Gran Familia Española sentada a
la mesa es la dictadura de aquellos que se creen con más… “derechos”… que más
“alto” hablan… y más “débiles” son. Indígenas de poblados “idiotas” de una
meseta, de “sin pelotas”. ¡Quién dijo miedo!... yo miro España, desde mi
pesebre de molicie obligada. Desde mi voluptuosidad de premuerte con el rabo
semoviente. España es una jodida puta barata, con su sacerdocio de salchichitas
calientes… y sus jueces, y sus primos beneméritos de padres putativos con sus
meritos de franquismo rancio. Loor... a vosotros solos.
La España de arco bucólico da un asco panorámico y simbólico. Y a los que me
digan: ¡Vete!... (… si no te gusta) yo les digo… sí, pero después de vosotros,
hijos de la grandísima puta que la habéis sodomizado. Empresarios, que compráis
esclavitud. Fascistas iletrados, que preferís ignorar el dolor ajeno… y os
ponéis de uniforme y fiesta de guardar… Españolazos de pro… que os creéis en el
“derecho” de llamaros a vosotros mismos, ¡españoles!, cuando sois:
¡Mesetoides!. Androides de engramas peregrinos de unas riveras catetas y
“sobrecalibradas”. Maldigo esa España villana con más “derecho” que nadie de sentarse a
la mesa que lo emponzoña todo. Y dirán: ¿Pero por qué estás indignado?.
¡Joder!. Por ti… ¡Gilipollas!. No ves el futuro que dejas a tus hijos. La España
que sin luchar y bajando los brazos, y alabando a los “deudores”… te has
labrado. La España que has ayudado a machacar para tus mayores… ¡Gilipollas,
joder!. Gilipollas es tu nombre… de ésta España de asco y ruina. De Feria de
Abril y paro, de fútbol y gallos… y gallinas de oficina sin una pluma, y
cacareando. Aguantando mecha… y votando a los más tontos y guapos. Soplapollas…
os llamo, y la vuestra no es mi mesa. Me entrego ya viejo y cansado al Rock and
Furious. Al Roll and Wheels. Pues siempre fui de la España Pirata que izó su
bandera negra con un par de tibias y una calavera mientras los tonticos de la
baba eterna me llamaban rojo… y ahora me tachan de, “podemita”. ¡Payasos!. Pero
de los verdaderos… no como yo que siempre he sido más: Artista de la Risa. Onomatopeya
de soldado. Retórica de poeta. Facundia de escribano. Cháchara balompédica.
Físico de verbosidad magnética para un tiro de unos pocos ochocientos… y, pico.