Duermevela de un esclavo

Duermevela de un esclavo

Las nomenclaturas másonicas: (Química del Universo Constructor)


Existen pocas certezas científico-religiosas, quizás sólo una, El Universo como un cluster de archivos "divino" es omnipresente… tal vez. Sea entre cuerdas, y dimensiones… infinitas, como un orden sucesorio de bigbangs y ripbangs en bucle… o como un recuerdo holográfico-físico sempiterno. Podría hasta tener sentido imperecedero que nuestro reconocimiento sea a un Dios Constructor del Universo… y pretendo ser sarcástico, yo no lo dudo… por ello esa forma para la más importante y principal de algunas viejas nomenclaturas masónicas que ahora no voy a entrecomillar… de momento. Y aquello tan viejo como el hombre sabio y zoquete de… ¿de dónde venimos?, ¿a dónde vamos?... etcétera… tiene fácil, más bien, facilonga respuesta. Buceemos en la Memoria, en Mayúsculas no gramaticales, de especie. Y en la Inteligencia. Y en el Pensamiento. Pues nuestra Mente es divina. Es conocimiento. Es La G de la Gnosis… de Dios. Somos Hijos de la Abiogénesis. El proceso del origen de nuestro instinto de supervivencia, por el que algunos dan las gracias a Jesucristo, a Mahoma, o al Buda en lugar de al Profeta Carbono. De la no existencia de vida El Universo nos dio la chispa justa de fuego “en los cielos” para hacer nacer entre “el lodo primigenio” una realidad en la cual partiendo de la materia inactiva, se transformó todo en simples compuestos orgánicos primarios tanto vegetales como animales. Inmensas transformaciones geoquímicas de éste tipo debieron que tener lugar por todo el cosmos. Y puede que lo que digo no sea más cierto que lo de Adán, y Eva, y una serpiente… y, una manzana… pero, el oscurantismo religioso se burla de la ciencia, siempre, con una estupidez tan vertiginosa y atropellada que descompone en un mero y nada complejo cavilarse. Y una mente divina debe pensar en: ¿Qué somos?... antes de un, ¿de dónde… venimos?. El Ente Hombre también está hecho de Carbono mayúsculo, en humanidad diminuta. Más de doce kilos y medio de nuestro peso lo es, tomando como media a un humano de unos setenta kilos de peso. Deberíamos pensar que un diamante es prácticamente carbono puro en una predeterminada y enrevesada estructura molecular… ¿El Hombre, el Ente Humano perfeccionado por la VIRTUS UTEM, no es acaso una “joya” de la creación?… Subpregunta: ¿Qué somos?. Más de un 45% de oxígeno… reyes y mendigos, los del IBEX… y los de la cola del desempleo, los del mandil… y los de la cruz… los políticos, y los que les sufragamos. Sí, incluso en nuestro interior hay al menos 175 gramos de azufre infernal, asesino y tóxico… por muy bondadosos que seamos.
Pues somos química del Universo Constructor, queramos o no. Ese es un secreto masónico. Simple. Obvio. De razón, y Gnosis. Pero que el ser humano no asume. Como que la vida en La Tierra comenzó hace unos 4.400 millones de años cuando el vapor de agua comenzó a condensarse. La vida, simplemente, vino del “fuego que ardía en los cielos”… el calor de las estrellas… del Dios Sol que debemos venerar, y de la Diosa Luna que enfrió “la más dulce de todas las verdades”… y, la escondió. Carbono, calor… agua, tierra, aire, fuego… los elementales, y Pitágoras en su cueva oculta de Samos. Guardando el conocimiento. La G masónica de toda Gnosis. Donde empiezan todas las nomenclaturas. Donde los albañiles masónicos hacen la mezcla para empezar la construcción. Cultos solares celtas, cultos solares egipcios, diosas de la abundancia y la naturaleza del “paganismo” antiguo, Isis… La Virgen María… las vírgenes negras, la mujer y su exuberante sexualidad que el cristianismo quiso aniquilar con oscuridad, que el Islam maltrata con la esclavitud del Burka Style. El Anj… La llave de la vida… la Cruz de la Vida egipcia no difiere mucho de la Tau franciscana con su asa que lleva El Ente Hombre con toda humildad. Símbolo del dios Mithra de los persas, dios solar… y, de los Aryos del E.S.T.E. y de la India más inescrutable y misteriosa. Mithra… dios solar… el ángel de luz, o la luz celestial… Luzbel… El conocimiento de la comprensión profunda de base científica debe de ser escondido de la ignorancia y superstición también del hombre moderno.  Una T cuadrada… es el símbolo de los masones modernos. Simple/mente. Dios arde en los cielos, nos da la vida… nos trae todas las escaleras de Jacob para subir a conocerlo, la elipsis de la ciencia a través de pantanales mariológicos. ¿Cuántos hombres de falsa fe aun reniegan de qué somos… partículas elementales en una estructura perfecta de eones de evolución?. ¿Cuántos entes humanos, hombres y mujeres libres ardieron por éste conocimiento ancestral y “satánico” que ocultaban a la estupidez establecida?. ¿Cuánta “estupidez establecida” queda aun?. Somos química del Dios Constructor… pero precisamos, y jamás lo dejaré de decir: VIRTUS UTEM. Y la argamasa está hecha. Conciencia, Libertad, Igualdad, S.A.P.I.E.N.T.I.A., humildad, hermandad… Un árabe, un blanco, un chino, un negro, judíos o cristianos, gays o fascistas… tenemos 175 gramos de azufre que "envenena" nuestro cuerpo… pero también, más de un 45% de oxígeno. Y agua… aire, materia del barro de la tierra, y el “fuego que arde en los cielos”.