Duermevela de un esclavo

Duermevela de un esclavo

El Libro Blanco de la Masonería (Prologo. Parte uno)


El Templo último espera permanentemente abierto... y, no es lo mismo ocultismo que oscurantismo. El mayor secreto de la masonería es mantener secreto el conocimiento de aquellos hombres que no son libres. El mayor secreto del conocimiento es poder ser revelado a hombres auténticamente libres. Es la esencia misma que se nos ha dado a una humanidad con muchos rostros y formas diferentes, es la verdad de un Dios Constructor y Arquitecto del Universo, su legado. Un legado de Libertad, de Igualdad, de Fraternidad, representado por La República, la división de poderes… El Pensamiento, La Memoria, el Ideal de la Mente redimida por El Libre Albedrío, La Conciencia, La Realidad Radical… algo que todas religiones emponzoñan con oscurantismo: Reglas, Dogmas, Sumisión… Dando el concepto de Dios, su culto y veneración a los sacerdocios, como se da el “culto” de las diversas ideologías, a los “sacerdocios” paganos de los liderazgos mesiánicos humanos. Las grandes fuentes del conocimiento más peligroso del hombre deben permanecer ignoradas por la pequeña humanidad de la violencia y el verbo enajenado. Y sé que el Gran Conocimiento es hermetismo, ocultismo… incluso, “conspiración”… lo es, porque no debe ser desvelado a aquellos que no tienen la dignidad científica de poseerlo y manejarlo sin el sustancial control preventivo. El mandil de un masón representa su vasallaje a la magna obra susurrada por el “Arquitecto”. Dar forma a la piedra por parte del cantero… modificar la estructura del átomo… concentrar los neutrinos en determinado gas para lograr algo “imposible”… Abrir la puerta de nuestra “prisión” universo hasta los límites mismos de la creación. Llegado el momento sabremos donde estamos, y quienes somos… por ahora hay demasiados protohumanos inferiores que creen en Dios, Alá, Ganesha, Yahvé, La Fuerza, La Nada… y tantos y tantos otros etcéteras paganos o no. Voy a escribir una simplicidad obvia, ni el agua del mar es azul, ni el agua que bebemos de una botella de la nevera está fría, es clara, libre de patógenos y dulce… Todo es una ilusión de realidad plausible. Hasta los conocimientos más sólidos de nuestra física actual pueden ser rebatidos por una enciclopedia de un universo desconocido. Desde los patrones de la humanidad misma… a no digamos de las diversas religiones enfangadas en supremacias, y falsos mitos.
La Masonería, así, en Mayúsculas, es Libertad… sí, Libertad, allá donde La Libertad no existe. O, aquí… donde La Libertad no termina de tener sentido. Porque ser libre es servir al hombre y su progreso, a la Humanidad, en Mayúsculas, y ser hermanos… ayudar a los oprimidos. Entender que significa pertenecer a un “Reino” sin regicidios de Conciencia Universal gobernado por el Libre Albedrío de cada uno en pos de la riqueza ética y moral de todos los miembros de éste “continuum” sin final. Y dentro de la verdad, una “verdad” relativamente decente y honesta... he aprendido muchas cosas. Como es el respetar el orden natural de las escalas donde el Ser Humano convertido en Ente Divino Inferior está en lo más alto de la pirámide sólo truncada por la servidumbre suprema del Ojo de Horus, del “Arquitecto”, de la mente creadora del Universo, de las neuronas creativas de las razas estelares de muchas y diversas entidades hermanas… Y que debemos respetar bajo la égida de la ciencia y la integridad absoluta a todos los seres inferiores “humanoides”, protohumanos sin Conciencia, y a los animales. Cualquier “bestia” tanto si es de cuatro patas y pasta entre prados y corrales, como si es de dos piernas y come y bebe el cuerpo y la sangre de “Cristo”, por ejemplo... y, embiste con ira cristianizadora y devota debe de ser respetada como parte de la obra universal. Amar forma parte de lo que significa ser Ente Humano… tanto, como aniquilar el mal que subyace en aquellos que pervierten el orden de la naturaleza de la Humanidad. Ser masón no es llevar un mensaje de paz, es llevar un mensaje de Libertad, Igualdad y Hermandad. Y los enemigos y aquellos que rehuyen el mensaje de los hombres libres no son dignos de comer del plato de la familia, La Gran Familia de una Conciencia completa, justa y armónica. Cristo, Mahoma o Buda, son inspiración no iconos que seguir y venerar, únicamente se debe venerar el conocimiento… Laborando desde canteras diversas todos somos hermanos, y nos sentamos a la misma mesa y comemos en igualdad sin que nadie tenga más que nadie pues estamos hechos de la misma sustancia y forma, de iguales elementos… no hay igualdad sin humildad. El libro en blanco os hará mirar a las estrellas…