¿Hay animales de poder?. ¿Símbolos
animales de poder?. ¿Símbolos animales masónicos?... ¿Cuál es… nuestro animal
del poder?. Seguro que un tigre, una serpiente, un león bicéfalo, o un águila…
tienen un buen predicamento y son “hermosos y recios” símbolos de poder para
hombres y mujeres con hechuras de liderazgo, incluso para pequeños humanos que
se creen hechos de la piel de los sueños y con "sueños" de dragones entre sus
meninges áureas… Desde los orígenes más arcaicos de la diminuta humanidad que
representamos, la raza del hombre ha construido y cimentado su cultura en torno
a las cualidades y características de algunas bestias totémicas… e, incluso,
mitológicas. Aun hoy cual unicornios rosas se asocia por ejemplo La Fuerza al toro, y se hace de la
tauromaquia un “arte” entre asquerosas comillas para considerar al
matador/asesino en serie de los bóvidos como “héroe” popular que doblega con su
Ingenio en “Mayúsculas” de Hombre La Fuerza de la “naturaleza”, con la
Inteligencia de su creación de muleta y estoque. Gimme The Power… aunque sea El
Poder de una Altamira moderna. Los estudiosos
de las tempranas edades del hombre afirman casi de manera categórica que el ser
humano primitivo representó a algunos animales de “poder” como parte de un entorno
de labor del tipo mágico-religioso. Para cientos de culturas elegir como su
protector a algún tipo de “bestia” a quien representar en su tótem era una
forma de poseer algunos de sus poderes tales como el valor, la fiereza, la
inteligencia, la voluntad e incluso la astucia. Cualidades todas ellas muy
humanas, pues son hechos culturales más allá del instinto… y El Ente-Hombre, irónicamente... se mueve
por Memoria, y no por recesos protohumanos. Pongamos que elegimos El Águila
como nuestro animal de poder… ¿hacemos de ella nuestro comodín conceptual como
símbolo de elevación sobre la mediocridad, emblema de la sabiduría-gnosis y el
crecimiento de un correcto conocimiento espiritual?. ¿Tatuamos a El Delfín como representación votiva de la voluntad divina y
suprema, la armonía, la gracia, el equilibrio y la ayuda a los demás?. La
Paloma nos entrega el poder de la paz del alma… El elefante la paciencia, la
prudencia… La Serpiente la transformación de la fe, cual muda la piel… en el silencio...
El Juego de la vida: Desde los
círculos uróboros o serpientes que se muerden la cola formado una perfecta “órbita”
del “eterno recomenzar y desde tiempos de las antiguas culturas egipcias,
griegas y romanas… el eterno retorno de las cosas siempre ha estado ahí uno con
los ciclos del Universo. Para los alquimistas tenía un profundo y serio sentido común el mundo de la naturaleza con sus misterios ancestrales; algo
que tiene mucho que ver con la unidad de todas las cosas que existen en el cosmos,
tanto las materiales como las espirituales que cambian constantemente de representación,
signo y grafía. Tratemos el escosismo animal. El Rito Escocés Antiguo y
Aceptado de la Masonería se compone de treinta y tres grados en los que, de
forma progresiva, se van mostrando a los masones que por ellos transitan, toda
una gama de conocimientos esenciales al Ente-Hombre que aspire a lograr un desarrollo
armónico en lo moral, intelectual, espiritual, en lo social, e inclusive, en lo
material. El Águila Bicéfala de Cabeza Blanca como símbolo ha sido traída
desde la antigüedad y, siendo servida como insignia y ave sagrada dedicada al
sol en Egipto; en Grecia, era el emblema de Zeus, y entre los druidas celtas,
el símbolo del Dios Supremo. El Águila de Dos Cabezas simboliza La Gnosis, una
de las cabezas representa al Progreso, la otra al Orden. El Águila es el único
animal que puede mirar fijamente, sin pestañar, la luz del Sol. Y al tiempo, el
Búho… mira a la Luna, lo oculto de la llama del género humano. Deus meumque
jus. (Dios y mi derecho) Para un 33 no hablamos de Justicia solamente, ni de la
Ley Suprema… ni de la Instrucción del trabajo en geometría estaúrica de tiempos y dimensiones desconocidas por muchos, millones sin Libertad ni disciplina para comprender la realidad… La ciencia que conozco y oculto
sabiamente a la ignorancia popular, es la llave que abre el futuro del más
mínimo spin de un electrón en un átomo de carbono a la piedra más devastada de
Mi Templo Adorado. Dentro de algunos eones muchos de los animales que ayudaron
a fortalecer los cimientos simbólicos de la masonería desaparecerán del mundo corrompido
y deshonesto que habitamos… solo existirán en las probetas de nuestro caos
simbólico como hasta ahora han vivido los dragones, El Ave Fénix, La serpiente
que se muerde la cola, y El León y El amado Toro Alado. “Bestias” que han compartido nuestros templos, la cúpula de un
zodíaco ”científico” guardado en las entrañas de la tierra “pitagórica” y
extraordinaria de nuestra añorada Arcadia.