Leo, y doy un trago de agua… porque algunas
veces, reflexionar… cuesta: Primero: La
UE dará los fondos de cooperación a los ejércitos de Sudán y Eritrea para que
frenen a los migrantes… el acuerdo tendría como objetivo contener los flujos migratorios en origen, en la línea del pacto con
Turquía. Segundo: Cuando un torero muere en España en el desempeño de su
trabajo, y valga que el ratio torero/toro muerto es de 1/20.000 para quien
defiende que es un combate “de igual a igual”, no sólo es el toro el
sacrificado, también la madre del toro y toda su descendencia corren la misma
suerte. Así los ganaderos aseguran “líneas de sangre” de casta, y “nobles”. “Reflexión”:
Ojos que no ven, hostia que os endiño. O dicho de otro modo, nuestra seguridad…
es la incertidumbre para aquellos “pobres” que nunca verán “la tierra
prometida” por un lado. El pacto de la corrupción democrática con la corrupción
política, por parte de organizaciones no gubernamentales que no tienen rodeos
“equívocos” de negociar con dictaduras… como esa chirigota del maltrato animal
es una actitud de postureo para el fin de semana. Duele ver el Toro de la Vega,
no los 60.000 animales que se sacrifican en fiestas varias estos días por todo lo
ancho del Estado. Porque los sufridos españolitos que comen y cenan con
el noticiero, no tienen que sufrir esa “pena de telediario” de ver a los jodidos "moros" sirios
en campos de reubicación pasándolas putas, y putas sus niñas robadas… ni saber
que pasa con miles de mascotas ni de animales sacrificados por “diversión”, ni
después de restablecerse el “orden establecido” otra maldita vez a nivel nacional, si
en Venezuela las siguen pasando negras, o no… Muerto el puto perro, se acabó también la
rabia. Los “negros” que no sean Obama, o Pogba, mejor cuanto más lejos, y que
tengan la decencia de morir allá, y no acá.
Así: Su
corrupción, es nuestra protección. “Ninguna violación”. Es inadmisible que
violen a una mujer en los Sanfermines… pero, si desaparecen miles de menores
sirios en Europa por la acción conjunta de las mafias del sexo centroeuropeas, y
toda la “inacción” posible de los estados presuntamente “democráticos” del viejo
continente… la “liberal” policía turca y el “arbitrario” ejercito de ese país…
¡No pasa nada!. Mientras se mate, y se viole lejos… en África, se descabellen
los toros allá en la dehesa de “los santos inocentes”… que ese “pacoelbajo” que
ve sus noticias tras otro duro día de explotación laboral siga comiendo sus
morcillas feliz de ser clase media “alta”, universitaria y fiel trabajadora, y
mantenedora del “sistema”. Hijos del soma que no piensa, cavila sus pequeñas
partes de la maquinaria que carcome sus entrañas mientras sangran vida e
hipotecas hasta morir. Algunas “pequeñas” cosas pueden parecer mezclar churras
con merinas, o… no tener relación coyuntural, pero lo cierto es que en espera
de la “próxima guerra”, ya hay toda una generación de imbéciles y crías
dispuestos y dispuestas para el sacrificio. En “Igualdad” en Mayúsculas,
absoluta. Esos que creen que la carne, los chorizos y el callo se cosecha en
bandeja plastificada, la fruta “perfecta” cae del árbol, y quieren calles
libres de negros y demás coloridos, fiestas sin maltrato animal y la mascota
perfecta, una España de ley y orden… un gobierno ya, y rebajas de impuestos…
pensiones garantizadas y empleo, y empleo, y cero corrupción… ¡qué precio
quieren pagar por ello!. ¿Precio?... dirán. ¡Ninguno!. Y no pagarán ninguno. Lo
pagarán sus hijos y nietos. Por su ceguera. Los matarán los “ganaderos” que
aseguran “líneas de sangre” trabajadora esclava para el siempre. Como dice Eduard Punset: No voy a los toros porque tenemos el mismo ADN.